por Haddamin Moulud Said
Para ganar la batalla de su libertad e independencia, los saharauis, habiendo renunciado a las armas, ahora mismo tienen abiertos dos frentes, uno, es la solución al conflicto, el otro, se refiere a los Derechos Humanos y la necesidad de incorporar, a la MINURSO, un equipo cuyas competencias serían la protección de los Derechos Humanos.
¿Qué es lo que ha hecho el POLISARIO, en ambos frentes, para que el Informe haya salido como ha salido?
En cuanto a la solución del conflicto, el POLISARIO, acude a las negociaciones con dos objetivos claros. El primero es alcanzar un acuerdo con Marruecos bajo la supervisión de Ross que sea satisfactorio para nuestros intereses. Pero, aquí, como en los tangos, dos no bailan si uno no quiere. Y aquí entra el segundo objetivo del POLISARIO: dejar claro, ante la comunidad internacional, que Marruecos es quien obstruye cualquier posibilidad de avance en las negociaciones.
Ciertamente, en el primer objetivo aquí planteado, el POLISARIO, difícilmente puede hacer gran cosa. Todo depende de la voluntad de la otra parte y, a lo sumo, al factor suerte. De ahí que no se le puede culpar de no hacer los deberes, al menos en lo referente a este primer objetivo.
Pero en relación al segundo objetivo, ha hecho el POLISARIO todo cuanto podía hacer? La respuesta es no.
A estas alturas del conflicto, se sabe que Marruecos, por sí solo, no puede seguir saliendo ileso en los Informes del SG o del Consejo de Seguridad. Para seguir saliendo tan bien parado como sale, necesita de una larga mano (Bujari, dixit) que tamiza toda Resolución o Informe relacionados con el conflicto. La pregunta, por tanto, es: porqué el POLISARIO no denuncia a Francia en los foros internacionales? ¿Quién le impide promover una denuncia, desde la Asamblea General, contra el comportamiento de Francia o, mejor aún, desde la mismísima Unión Africana? ¿Quién le impide hacerlo, desde el Movimiento de países No Alineados? Alguien podría decir que esa campaña sería inútil porque sería algo así como hacerle cosquillas a Francia. Pero no nos equivoquemos, ningún Estado acepta, de buena gana, que se manche su reputación internacional por muy nimio que sea el asunto. Si el POLISARIO se queja de la ‘larga mano’ de Marruecos, ¿Entonces, quién le impide al POLISARIO tener, él también, una larga mano? ¿O quién le impide, al POLISARIO, combatir esa larga mano?
Digo yo que, por ejemplo, Brahim Gali, en más de una ocasión, se habrá quedado sin comer y sin concluir su té, porque los Mirage franceses, obligaban a cambiar de sitio a las unidades de combate. Luego no entiendo cómo es que, ahora, nuestra Dirección Política intente reconciliarse o congratularse con Francia. El POLISARIO ha de saber que, jamás, va a ofrecer a Francia lo que Marruecos le ofrece y, por tanto, no existe ni siquiera la posibilidad de que Francia altere, en lo más mínimo, su legendaria enemistad con la Causa Saharaui. En la literatura colonial, consta documentado lo que se conoce con el nombre de ‘Síndrome de Fashoda’, en la parte oriental del Gran Sahara. Pues bien, en la parte occidental de ese mismo Gran Sahara, concretamente, en Ajshash, existe también el ‘Síndrome de Gleib Alfartuna’. De ahí que no exista posibilidad alguna de que Francia sea, ni de lejos, un aliado de los saharauis. En consecuencia, el POLISARIO tiene que moverse para hacerle ver, a Francia, que esa actitud no le va salir gratis. No basta con las declaraciones políticas, es necesario dar la batalla, para obtener denuncias, en los foros internacionales (Unión Africana, No Alineados, Asamblea General, etc.).
Por lo que respecta al segundo de los frentes relativo a los DDHH y la necesidad de que la MINURSO se ocupe de su protección, resulta evidente que las carencias del POLISARIO, en este terreno son, realmente, desesperantes.
Ya hemos aludido, desde estas mismas páginas de arso.org, a lo tardía y mal planeada declaración del Coordinador con la MINURSO, hecha desde Brusleas el pasado día 07-04-2010. Pero vayámonos a un momento algo más remoto. Vayámonos al momento de creación del llamado Ministerio de los Territorios Ocupados. En este sentido, hagamos estas preguntas: ¿Desde cuándo tenemos un Ministerio dedicado a los Territorios Ocupados? ¿Cuál es, realmente, su finalidad? ¿Qué ha pasado al otro lado del muro, para crear dicho Ministerio, después del alto el fuego y no antes? En el supuesto, francamente, poco verosímil de que la protección de los DDHH en el Sahara Ocupado, haya sido una de sus prioridades, qué es lo que se ha hecho al respecto, en ese Ministerio desde 1998, año de su creación?
Desconocemos a dónde hay que acudir para encontrar respuesta a estas preguntas.
Viajemos, ahora, a Viena, sede de los organismos de la ONU competentes en materia de Derechos Humanos. Cómo es posible que en pleno siglo XXI, nadie haya presentado, jamás, ni una sola denuncia, escrita y válidamente registrada, ante el ACNUDH o el Consejo de DDHH o el Comité de DDHH o, incluso, la MINURSO? ¿Se puede ser más incompetente? ¿Para qué tenemos un representante adscrito a esos organismos en Viena?¿Dónde están las denuncias que acreditan que, efectivamente, existen violaciones de DDHH en el Sahara Occidental? ¿Cómo demonios pretenden dejan constancia acreditada de tales violaciones sino es mediante la denuncia por escrito y válidamente registrada? ¿A caso, alguien se cree que con un par de cartas que Abdelaziz dirija a BKM, queda acreditada la violación de los DDHH en el Sahara Occidental? ¿Cómo es posible que, después de lo que ha llovido, el Informe de Ban Ki Moon, tan sólo diga que las partes se acusan mutuamente? ¿Los fallos y lagunas de BKM se deben a la larga mano de Marruecos o a la ignorancia supina de nuestros responsables políticos? ¿Dónde están las pruebas que acreditan la violación de DDHH en el Sahara Occidental? Hay algo más inmoral que, a la vista de las masacres que sufre nuestra población, Ban Ki Moo tenga que recurrir, aún, a las informaciones periodísticas o las facilitadas por las ONG’s, para aludir a tales violaciones?
Para qué sirve el recientemente creado Comité Nacional para el seguimiento de la situación de presos políticos saharauis? Bachir Mustafa, ha salido en los informativos, diciendo que para despegar, el Comité, necesita de dos alas: El Ministerio de Exteriores y el de los Territorios Ocupados. No sabemos si con esa declaración informa de la composición del Comité (algo que ya se sabe) o más bien, y esto es lo lógico, se queja de la resistencia de ambos ministerios a trabajar dentro del Comité.
Ya ven. Ni siquiera para hacer un seguimiento de la situación de los presos políticos saharauis, nuestros ministros se ponen de acuerdo. ¿A dónde vamos a parar con esta situación?.
Y en medio del caso, al Presidente de la RASD no se le ocurre mejor idea que hacer un llamamiento a la población saharaui para que el próximo día 17-04-2010, en solidaridad con los presos políticos, todo el mundo, haga huelga de hambre ese día. En lugar de dar un puñetazo en la mesa y poner a trabajar a los Ministros, el Presidente va dirigiendo cartas, ora a BKM ora a la población para que haga huelga de hambre.
Haddamin Moulud Said (ibnuabirabiaa@yahoo.es). Valencia (España)
15.04.10
--------------
Este texto expresa la opinion del autor y no de los moderadores del foro.