Hay momentos en la historia que se viven plenamente, antes de que la misma historia quede plasmada en los libros, antes de que se le enseñe a los niños en las escuelas .
Ese momento del que uno es testigo presencial y que sabe que pertenece a todos donde quiera que esten.
El momento justo antes de que se anuncie la gran noticia, cuando la historia se vive en el presente; cuando un monstruo de nuestro mundo se metamorfosea ante los ojos de uno, en una noche tibia de un otoño tardio en Chicago.
Estoy casi seguro que en algun lugar habra una ley que me prohiba estar tan contento como lo estoy en estos momentos.
Se que solamente la independencia de mi Sahara rivalizaria con tanta emocion y desbordamiento de alegria que siento ahora, y espero que todos podamos celebrar y compartir esa alegria algun dia por la que muchos soñaron y lucharon, como han soñado y luchado antes generaciones de afroamericanos, y hoy, por fin, se hace realidad: Barack Obama acaba de ganar.
J. Beiruk
Chicago, 04.11.08
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