por Limam Boisha
Mientras Marruecos ha desterrado a Aminetu Haidar de su patria el Sahara Occidental ocupado (más que decisión es un capricho del tirano), durante muchos años la dinastía feudal alauí se ha especializado en acoger en su territorio a algunos de los dictadores más sanguinarios. Amparó al Sha de Irán cuando el pueblo salió para derrocarle en 1979. Recibió con los brazos abiertos a Mobuto Sese Seko, Expresidente del antiguo Zaire, actual República Democrática del Congo; el Gran Dinosaurio como le llamaban algunos se exilió en Marruecos hasta su muerte en septiembre de 1997 en un hospital militar. También han recibido y está actualmente allí curándose de un balazo el golpista de Guinea Conakry.
Todavía más, el régimen alauí era íntimo amigo del sanguinario Omar Bongo de Gabón, otro Dinosaurio que falleció en un hospital de Barcelona en 2009. Colaboró intensamente con los gobiernos del Apartheid en Sudáfrica. (Por eso la actual Sudáfrica reconoce la Republica Saharaui) Gracias a Israel construyeron el muro militar de 1200 km que divide el Sahara Occidental y con el dinero de otro régimen feudal, Arabia Saudí, financiaron parte de la guerra contra el pueblo saharaui y siguen dándoles todo tipo de apoyo, especialmente el político en el mundo árabe y a nivel internacional.
La cara amable que nos intentan vender los lobbystas de Marruecos en España como Moratinos, Felipe González, Aristegui y otros, solo es humo, una burda caricatura. Y Francia, el país de las libertades, es el mayor defensor de la dictadura alauí. Qué triste. ¡Cuánta hipocresía! Pero esa hipocresía ha sido desenmascarada y ahora no saben qué hacer. Pero lo más sorprendente es que siguen todos los defensores de Marruecos siguen mintiendo para proteger al déspota y como diría Eduardo Galeano: “mienten con admirable sinceridad”.
Limam Boisha
13.12.09
--------------
Este texto expresa la opinion del autor y no de los moderadores del foro.