por Brahim Aduh Abdelkader
Un año después de la muerte del lider Saharaui , Mohamed Abdelaziz, se hace obligada un parada para analizar sus luces (muy pocas en la ultima etapa) y sus sombras (demasiadas en la ultima etapa). Se podria decir que Abdelaziz, tuvo dos etapa al frente del Frente Polisario la primera de (76 al 88) y del 88 al 2016. En la primera , hubo muchos aciertos, jalonados por un sacrificio colectivo, que en muchas ocasiones, ha sembrado la confusión sobre las causas reales de ese éxito; ¿es por la buena direccion?, ¿es por la entrega colectiva del pueblo saharaui?. Yo, claro esta, me inclino por la ultima opción, porque la dirección , no puede ser un dia muy buena y el otro muy mala. Pero si que hay que reconocerle a Abdelaziz y sus compañeros de aventuras el valor añadido de liderar ese proceso de sacrificio y entrega de todos los Saharauis, y sobre todo el manejo de las diferentes situaciones que se dieron en esa etapa (76-88) sin tener prácticamente ningún tipo de experiencia, solo basandose en la teoría de otros procesos similares. Por ello, y porque las actuaciones buenas, nunca son colectivas y tienen que tener nombre y apellido, vamos a darle el nombre de Mohamed Abdelaziz y compañía .
La segunda etapa de Abdelaziz (88-16), ha sido catastrófica en general, se ha visto superado, Eel y el resto de compañeros, por todos los acontecimientos y las soluciones escogidas siempre han sido las erróneas. El factor básico de esta etapa ha sido que los Saharaui abandonaron la cohesión y unidad que junto con el sacrificio total caracterizaron la primera etapa . Y Abdelaziz y compañía no supieron gestionar ni manejar la nueva situación, caracterizada por una nueva dinámica, impulsada por el despertar del vinculo tribal y de las comodidades materiales.
Abdelaziz y demás dirigentes, lejos de administrar, dirigir y controlar la nueva situación, hicieron, justo lo contrario, dejación de sus responsabilidades, empezaron a cometer una serie de errores que tiraron al traste todo el patrimonio conseguido en la década anterior. La secuencia del mal hacer, de las chapuzas, y de los comportamientos indignos, fue evolucionando hasta cuotas inimaginables: corrupción endémica, clientelismo acentuado, uso descarado del tribalismo, perpetuación en el cargo, confundir las propiedades del estado con las propias, la labor de dirigir se hace a gusto del individuo y no de la sociedad ni de la organización, falta de empatía con la gente y sus problemas, falta de jerarquia, falta de orden, falta de un guia, predomina la anarquía, y el abuso de la autoridad , no se tienen en cuenta las capacidades y aptitudes de las personas, enchufismo, enrriquecimíento ílicito, se premia mas al corrupto e irresponsable que al honesto y militante , en definitiva se puede estar horas y horas escribiendo la parte negativa de la gestión de Abdelaziz y demás dirigentes en la etapa 88-16 .
Y en estas llego Brahim Gali, laureado con el aura , de ser junto a los difuntos Jalil y Mahfud , los únicos dirigentes que no se han manchado en la corrupción. En el se deposito muchas confianza, muchos militantes volvieron de sus exilios, otros hicieron el amago de volver, otros comenzaron a implicarse de alguna manera en la lucha diaria, sin embargo, un año después toda esa esperanza se esfumo, y Brahim acabo dandole la razon, a los entendidos, que desde el primer dia dejaron claro que es la persona menos apropiada para dirigir la lucha del pueblo Saharauis . Porque si Abdelaziz hacia, aunque casi todo lo hacia mal, por lo menos hacia algo. Según los expertos, Brahim no ha hecho ni hará nada, que es casi peor que hacer las cosas mal. Lleva un año en el poder, un año perdido, eso si con mucha propaganda, intencionada o no, pero demasiada propaganda, propiciada por la necesidad que tiene un pueblo que sufre de tener responsables honestos y de altura.
La labor de Gali, hasta el momento se limita a no hacer nada, a dejar las cosas como estaban, a esperar que se acabe de derrumbar definitivamente (como quieren los marroquíes) o que las cosas se arreglen por arte de magia.
Por eso, creo y espero que Brahim dure en el cargo menos de lo que duraria un merengue en la patio de un colegio, en el recreo.
Brahim Aduh Abdelkader
braduabd[at]yahoo.com
12.06.17
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12.6.17
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