Quizás algunos pensemos diferente, quizás seamos de otro planeta, quizás seamos raros , pero hay una cuestión en la que seguro que coincide mas del 90% de los Saharauis, porque la padecen desde hace varios años y que clama al cielo; Como es posible, que después de 45 de lucha , de sacrificio, de entrega, de sufrimientos y de formación. Nuestro destino lo estén manejando personas mayoritariamente Octogenarias. Donde tenemos los miles y miles de jóvenes que se cultivaron en Cuba, Argelia, Libia, España y muchos mas países?, han sido ninguneados o su formación es falsa?. Alguien a nivel del estado Saharaui se ha puesto a analizar esta situación? , se ha extraído alguna conclusión?, se ha planteado algún tipo de relevo?, se ha preparado alguien para ese relevo?. O la alternativa es morir apegados al cargo y a la silla.
La situación es sangrante, el Estado Saharaui no puede estar en manos de nuestros abuelos, porque sus facultades físicas y mentales no les permiten tal grado de toma de decisión. Son nuestros abuelos, los queremos, valoramos su sacrificio y entrega en momentos durisimos, no vamos a tirarlos, pero es hora de que se queden en su casa y que se tomen un mas que merecido descanso, queremos tomar el timón del barco y ser su relevo es la única forma posible que hay para que este barco llegue al puerto, de lo contrario seguirá navegando sin rumbo.
Hace varios años, en estas mismas paginas y cuando la situación no era de emergencia absoluta, propuse que el estado Saharaui debe introducir un sistema de jubilación para sus dirigentes y cuadros a partir de cierta edad, pero el barco siguió navegando y hoy le entra agua por la proa y la popa y no solo no se ha creado una formula, sino, que no se ha preparado a nadie para sustituir a unas personas que van quedando por el camino y vamos perdiendo una cada seis meses.
Es urgente, encontrar soluciones a esta dramática situación , y dicha solución debe llegar preferentemente del Estado, ya que es el único capaz de darle una salida. La solución es relativamente fácil; El Estado debe garantizar a nuestros actuales dirigentes y abuelos una salida digna consistente en un incentivo monetario , ciertos privilegios (coches etc) y un órgano de toma de decisión en lo referente al destino del pueblo Saharaui, algo así, como el actual e intranscendente Consejo Nacional.
Solo así, podemos garantizar la continuidad de nuestra lucha y el logro del objetivo supremo que es llevar a nuestros Abuelos y abuelas de vuelta a Casa.
Brahim Aduh Abdelkader
28.05.28
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