por Lehbib Brahim Labid
En mayo 2012, Marruecos retiró su confianza a Christopher Ross, enviado de la ONU, para el Sahara Occidental, por la razón que -según Marruecos- las nueve rondas de negociaciones anteriores en Mahanset (periferia de Washington) no han dado su fruto.
En estas rondas, Marruecos se refugiaba, fingiendo, tener una voluntad política, en aras de hallar una solución al conflicto. Mientras, la realidad era otra: demostrar a sus aliados y amigos (no a lo ONU y los saharuis, que saben la verdad), que está negociando con el POLISARIO, bajo los auspicios de la ONU.
Todas las rondas han culminado con la frustración, por los obstáculos creados por el ocupante. A Marruecos le hubiera gustado que se siguieren celebrando hasta el fin del mundo, porque para él eran un deshago.
Christopher Ross, entendió la jugada de Marruecos y decidió que, mientras no lleguen a un acuerdo, no se van a celebrar más encuentros y que se limitará a visitar las partes en conflicto y a los países observadores en sus respectivos lugares. Hecho que destapó los malos designios de Marruecos.
La ONU, a través de algunos miembros del consejo de seguridad, encabezados por Francia, que veta cualquier resolución favorable a la autodeterminación del pueblo saharaui, crearon para Marruecos, en los últimos 25 años, las condiciones propicias para perpetuar su ocupación al Sahara, Y el consejo de seguridad es lo que es: si uno de los miembros permanentes veta una resolución, esta se convierte en papel mojado.
Ante la intransigencia de Marruecos, Ban Ki Moon, programó para el mes de marzo una gira en la zona. Argelia, el POLISARIO y Mauritania, dieron su bienvenida, mientras que Marruecos ha rechazado la visita, aplazándola para el mes de julio, tres meses después de que el Consejo de Seguridad haya emitido su resolución y así alargar la vida de este, ya, longevo conflicto. La altanería y arrogancia de Marruecos le conducen al desacierto, hasta el límite de fijarle a la ONU, cuándo su secretario general ha de visitar a ese país o a los territorios saharauis ocupados.
La visita tenía como objetivo capital, impulsar las negociaciones entre el F.Polisario y Marruecos, bloqueadas por éste último, no desde ahora, sino, siempre. También, en caso de no haber avances, reflejarlo en su próximo informe, que presentará al Consejo de Seguridad, en el mes de abril. Su visita a España, Mauritania, Argelia, Campamentos de Refugiados Saharauis y, en especial, a Bir Lahlu, en las zonas liberadas de la RASD, supuso, para Marruecos, la gota que colmó el vaso.
Puede tratarse de una confabulación, dada la astucia y malicia del gobierno y asesores del monarca que están buscando, sin tregua, pretextos para evitar una futura visita de Ban Ki Moon y cualquier contacto con la MINURSO de la que, ya, no están sacando ningún provecho. Esta misión de Naciones Unidas, para el ocupante ya está fuera de juego. Nunca ha tenido la intención de celebrar el referéndum. De otra parte, su propuesta de autonomía murió antes de nacer.
Marruecos, cada vez que se encuentra en apuros, se lanza contra Argelia, calificándola como parte principal en el conflicto; contra el POLISARIO; contra la UA, de la que no es miembro; contra la UE y por último, lo que le faltaba, contra la ONU, difamándola, atacando a la figura de su secretario general, tildándolo de pro-saharaui y que está atentando contra “la integridad territorial de Marruecos” y contra “las aspiraciones del pueblo marroquí”. Términos no reconocidos por la ONU, en ninguna de sus resoluciones. Sin embargo, sí, se reconoce el legítimo derecho del pueblo saharaui a la autodeterminación. Pero ¿Qué será Marruecos sin el Sahara?
Estimados lectores, Marruecos es una fuerza de “ocupación”, lo diga quien lo diga, lo niegue quien lo niegue. Y la persona más idónea para decirlo es Ban Ki Moon, secretario general de una organización que ha de velar para que la estabilidad, la paz y la justicia reinen en todo el planeta. Ban Ki Moon, emocionado por lo que vio, en los Campamentos de Refugiados Saharauis, dijo la verdad: 40 años sin sentido, en medio de un desierto inhóspito, en el olvido por parte de la comunidad internacional.
La presencia de Marruecos en el Sahara, es una ocupación, sin lugar a dudas. Acaso ¿El Sahara Occidental, no es una cuestión de descolonización iniciada por España e inconclusa? ¿No es un territorio no autónomo, clasificado, así, por la ONU? Y sino ¿Qué país en el mundo reconoce la soberanía de Marruecos sobre el territorio ocupado? Que me citen, por favor, uno, solamente, uno… Lo ruego.
"Fuerza, determinación y voluntad para imponer la independencia y la soberanía”
Lehbib Brahim Labid
18.03.16
ledidi56(at)yahoo.es
18.3.16
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